Me llamo Leire y tengo 7 años. Después de 8 operaciones derivadas de la Fibrosis Quística, muchas muchas horas de tratamientos a diario y frecuentes hospitalizaciones, continúo donando ganas a mi familia, a mis amigos y a mis médicos, porque la Fibrosis Quística no puede con mis ganas de vivir, de divertirme y de aprender.
Aunque a veces me canso o no puedo respirar bien, sigo mi tratamiento y voy a divertirme al parque con mis amigos, a nadar a la piscina, a jugar al pádel o a disfrutar de lo que más me apasiona, BAILAR.
No hace más cosas el que puede, sino el que quiere, y yo QUIERO. Por eso, espero que quien lea esto acepte mi donación de las ganas que tengo de vivir. Dono mis ganas a todos los que me rodean para que nos ayuden a que se continúe investigando en la Fibrosis Quística y avanzando en el tratamiento para llegar a una cura.
«Soy Leire y todos los días dono a los que me rodean mis ganas por vivir. La vida es un regalo que tenemos que aprender a abrir y disfrutar todos los días. Y la mejor manera es con una sonrisa. Somos #donantesdeganas.»